Diversos testigos con identidad reservada que fueron parte de los declarantes en las investigaciones de la “Operación Justicia para Chihuahua” sufrieron de ansiedad, estrés, depresión y pensamientos suicidas a raíz de la presión que sufrieron por parte del Gobierno de Javier Corral durante los interrogatorios en la Casa de Gobierno.
Lo anterior se dio a conocer por el Ministerio Público durante la audiencia inicial en contra de Francisco G. A. por presunta tortura psicológica bajo la causa penal 3176/2022.
Según el informe de uno de los psicólogos que forman parte de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas, tales testigos que fueron obligados a rendir declaraciones a modo requirieron terapia y acompañamiento emocional por periodos de 6 a 8 meses.
Los pacientes del psicólogo manifestaban la presión que tenían por parte de la Fiscalía General del Estado en la pasada administración para declarar en contra de exfuncionarios duartistas como Antonio Tarín y Gerardo Villegas, así como de políticos como Alejandro Gutiérrez Gutiérrez, exsecretario adjunto del PRI Nacional.
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