Con la llegada de la tan esperada temporada de lluvias, se pone de manifiesto la vital importancia de los limpiaparabrisas en nuestros vehículos. Mantener los limpiaparabrisas en óptimas condiciones no solo garantiza una visibilidad clara durante los aguaceros, sino que también contribuye a la prevención de situaciones peligrosas en la carretera.
Aunque la respuesta puede variar, algunos fabricantes automotrices sugieren reemplazar las plumillas limpiaparabrisas anualmente, y llevar a cabo un mantenimiento cada seis meses. Sin embargo, esta regla general está sujeta al uso que les des y a las condiciones en las que tu vehículo se encuentra.
Tanto instituciones de tránsito, como Caminos y Puentes Federales (Capufe), y reconocidos fabricantes automotrices, como Ford, concuerdan en que es esencial prestar atención a ciertas señales para determinar cuándo es necesario un cambio inmediato de tus limpiaparabrisas:
Irregularidades o Cortes en las Gomas de las Plumas: Si notas que las gomas de tus plumillas limpiaparabrisas presentan desgastes irregulares o cortes, es un indicativo claro de que es el momento de cambiarlas. Estas imperfecciones pueden afectar su capacidad de limpieza eficiente y obstruir tu visión.
Ruidos Inusuales Durante su Uso: Si los limpiaparabrisas generan ruidos molestos al estar en funcionamiento, incluso con el cristal mojado, esto podría señalar un problema en su desempeño. No debes subestimar este síntoma, ya que los limpiaparabrisas silenciosos son esenciales para una conducción segura bajo la lluvia.
Saltos o Atascos en su Movimiento: Si tus limpiaparabrisas tienden a saltar o atascarse mientras están en uso, es un signo claro de que sus mecanismos internos podrían estar comprometidos. Esto puede resultar en áreas no limpiadas en el parabrisas, lo que reduce drásticamente tu visibilidad.
Dejan Manchas o Marcas en el Vidrio: Si después de usar los limpiaparabrisas notas que quedan manchas o marcas en el vidrio, es probable que las plumillas estén desgastadas o sucias. Esto puede obstruir tu visión, especialmente cuando enfrentas condiciones climáticas adversas.
Es especialmente relevante tener en cuenta que, después de periodos de uso intensivo como fuertes lluvias o al concluir el verano, es aconsejable prestar especial atención a tus limpiaparabrisas. El calor y la radiación solar pueden acelerar el deterioro de la goma, lo que podría resultar en su fragmentación mientras los estás utilizando.
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