La policía Federal detuvo este viernes a un grupo de hackers que en los últimos días amenazó, mediante llamados a emergencia, con la colocación de bombas en edificios gubernamentales, estaciones de trenes, colegios, a jueces y a la sede de oficialista de Unión por la Patria, lo que obligó a la evacuación de diversos lugares y produjo una sensación de inestabilidad política a poco más de una semana de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del próximo 19 de noviembre.
Los detenidos forman parte de un grupo que se define como “antisistema”, en los mismos términos que lo hacen los candidatos a la presidencia y vicepresidencia de La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei y Victoria Villarruel, que además reivindican a la pasada y cruenta dictadura militar (1976-1983) y niegan la existencia de desaparecidos, amenazando con acabar con el movimiento de derechos humanos, que puso a este país a la cabeza de la lucha contra la impunidad en el mundo.
En seis allanamientos de la Policía Federal sucedidos en González Catán, conurbano bonaerense, se encontró una “cantidad asombrosa de materiales electrónicos e informáticos, chips, pendrives y, por supuesto, celulares y computadoras. Uno de los detenidos huyó por los techos de las viviendas linderas y en el camino tiró celulares y chips, pero los efectivos lograron aprehenderlo”, informó el periodista Raúl Kollman, en Página 12.
Los detenidos se llaman a sí mismos “la Mafia del Hentai” que en japonés significa “la mafia de los pervertidos”. De acuerdo a los analistas tiene, un “perfil parecido a Los copitos”, al grupo vinculado al intento de magnicidio contra la vicepresidenta, Cristina Kirchner, el 1° de septiembre de 2022.
Ha pasado más de un año sin que se haya definido este gravísimo delito y la jueza María Eugenia Capuchetti es parte del Partido Judicial, que logró formar junto con la embajada de Estados Unidos el ex presidente Mauricio Macri.
La investigación sobre este y otros hechos no se resuelve aún, pero las últimas acciones de Villarruel intentan poner en libertad a los militares enjuiciados por crímenes de lesa humanidad cometidos durante la pasada dictadura, condenados por la justicia, con prueba y evidencias del terrorismo de estado que se aplicó entonces. Uno de los simbólicos personajes del terror, el marino Jorge “Tigre” Acosta apareció en un mensaje desde la cárcel apoyando a Milei.
Otro amigo de Villarruel un retirado de las fuerzas armadas Iván Volante mostró en un mensaje un automóvil Ford Falcon verde de los que utilizaban para secuestrar a las víctimas durante la pasada dictadura, diciendo, en este baúl(del automóvil) “caben siete(personas) aunque un poco incómodos”.
La ola negacionista que comenzó Villaruel se expresó en el debate con el candidato a Vicepresidente de Unión por la Patria, Agustín Rossi, cuando en forma violenta, ella sostuvo que no hay 30 mil desaparecidos
En este oscuro escenario repentinamente apareció una luz. Una joven periodista hija y nieta víctimas de la dictadura sorprendió cuando en un viaje en el metro se paró pidió disculpas a los pasajeros, y dio un testimonio de su vida que conmovió a todos.
Anita Careaga, hija de Ana María Careaga (sobreviviente del centro clandestino de detención Club Atlético durante la última dictadura), y nieta de Esther Ballestrino de Careaga (una de las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo) contó su trágica historia familiar para pedir a los argentinos y argentinas que, por el bien de la democracia, no voten a Javier Milei.
“Estoy un poco nerviosa. Nunca en mi vida hice esto y lo hago porque estoy muy preocupada. Yo nací en Suecia. Nací cuando acá en Argentina había una dictadura. Mi mamá tenía 16 años cuando la secuestraron embarazada de mí. Fue a un campo de concentración donde la despojaron de todo, incluso su nombre: pasó a tener una letra y un número. Fue brutalmente torturada, cumplió 17 años en ese campo de concentración”, dijo Anita ante los sorprendidos pasajeros que escucharon el relato de la joven quien dijo que su abuela salió a buscar a su madre “y se encontró con otras que hoy se conocen como Madres de Plaza de Mayo”. Su abuela y otras dos madres Azucena Villaflor y María Ponce de Blanco fueron secuestradas por los marinos del temible Centro Clandestino de la Escuela de Mecánica de la Armada (Esma), junto con dos monjas francesas y otras ocho personas entre el 8 y 10 de diciembre de 1976.
“Amo este país, quiero vivir acá, quiero que todos podamos vivir teniendo diferencias, diciendo nuestras diferencias y sin miedo a que nos secuestren, a que nos torturen, y a que nos arrojen con vida al mar (…) “por favor, por la democracia, no voten a Milei”, pidió y fue aplaudida . Este video circuló todo el día de ayer. “Fue un sol en un día oscuro. Una luz de esperanza que nos tocó a todos”, dijo el Premio Nobel de La Paz Adolfo Pérez Esquivel.
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