En la reunión con su homólogo y gran aliado Vladímir Putin, han hablado sobre la reconstrucción de su país tras casi doce años de guerra civil, en la que el Ejército ruso intervino para evitar su derrocamiento y ahora mantiene su respaldo en la lucha contra los insurgentes.
Al Asad ha agradecido, además, la ayuda humanitaria enviada tras el terremoto del pasado febrero.
“Nosotros, como verdaderos amigos, intentamos apoyaros“, decía Putin. “Como sabéis, nuestras unidades del Ministerio de Emergencias estuvieron allí. Los representantes de las Fuerzas Armadas destacadas en Siria también contribuyen a superar las consecuencias del terremoto”.
También se ha tratado sobre la mediación rusa para mejorar las relaciones de Siria y Turquía. Y qué mejor forma para Al Asad de demostrar su compenetración que repetir las consignas de Putin sobre Ucrania y el nazismo.
“Me gustaría aprovechar la oportunidad de mi visita a Rusia, justo después del aniversario de la guerra en Ucrania, para reafirmar la posición de Siria sobre esta guerra y contra el nuevo nazismo”, dijo el presidente sirio.
DOCE AÑOS DESDE LAS PRIMERAS MANIFESTACIONES CONTRA AL ASAD
Putin ha destacado que el intercambio comercial entre sus países aumentó un 7% el año pasado.
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