En el barrio de San Miguel, Lagos de Moreno, llegaron dos vehículos blancos: una pick-up y una camioneta cerrada, con más de diez hombres armados.
Los hombres se dirigieron directamente a las gradas donde cinco jóvenes estaban sentados, para llevárselos.
Los hombres no interceptaron a los jóvenes en la carretera ni en la Feria, como se había dicho.
En las gradas quedó una mancha hemática, posiblemente de un disparo, según dice Héctor de Mauleón en su columna para El Universal.
Los cinco jóvenes, de 19 a 22 años, iban a reunirse con otra persona en la explanada.
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