Un grupo de mujeres realizó este sábado una protesta frente a las instalaciones de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) con el propósito de denunciar a los militares que han ejercido abuso de poder en contra de ciudadanos.
Esta manifestación es una de las tantas que han sucedido desde hace más de dos añospara exigir justicia por la impunidad en los casos de violaciones a los Derechos Humanos por parte de elementos de la Sedena.
En este sentido, la manifestante Laura Kabata aseguró que dichas movilizaciones “no son por capricho” ni para manchar la imagen del gobierno actual, sino para hacer valer sus derechos como ciudadanos y exigir una respuesta de las autoridades.
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Kabata relató que, en 2009, su hijo Óscar, en ese entonces de 17 años de edad, fue detenido arbitrariamente en Ciudad Juárez, Chihuahua, y fue llevado al destacamento militar, donde fue torturado y víctima de abuso sexual por elementos castrenses.
Asimismo, afirmó que su hijo salió con vida, pero los militares que lo atacaron siguen sin ser castigados. Entre ellos se encontraba el general Felipe de Jesús Espitia, actualmente retirado.
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