El operativo del Grupo Especializado en la Atención Migratoria (GEAM) del Instituto Nacional de Migración (INM) permanecerá todo el mes de abril en el bordo del río Bravo, con la posibilidad de extenderse más tiempo, para inhibir los cruces irregulares de personas migrantes de Ciudad Juárez a El Paso.
Después, se extenderá hacia el sur del Estado, con el fin de evitar nuevos asentamientos de personas migrantes, y establecerá un Centro de Operaciones Regional en Ciudad Jiménez, según el informe oficial del operativo, girado por el director general de Coordinación de Oficinas de Representación, Héctor Martínez Castuera.
Los 210 agentes federales de migración que conforman el operativo, desde el pasado el lunes 1 de abril recorren la frontera mexicana abarcarán posteriormente Coahuila y Durango, en donde trabajarán en coordinación con las autoridades locales y estatales.
En esta frontera, el INM es apoyado por elementos de la Guardia Nacional (GN) y de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), mientras que el Estado no fue convocado.
A través de patrullajes, los agentes federales buscan ahuyentar a los migrantes, para evitar que salgan del país por la frontera norte, por lo que en algunas ocasiones los persiguen a bordo de sus unidades, provocando que los migrantes se asusten y corran hacia el bulevar Juan Pablo II o hacia el río internacional, como ocurrió durante los dos primeros días del operativo.
El lunes dos migrantes que fueron perseguidos por una van del INM regresaron corriendo hacia el bulevar, y escaparon entre los vehículos, por el temor a ser devueltos hasta el sur del país.
Ayer, un grupo de personas también fue perseguido por los agentes, por lo que unos hombres tomaron piedras y palos para tratar de evitar ser detenidos; sin embargo, los agentes finalmente se alejaron.
“Los hubiéramos llevado a un albergue”, dijo un agente de Migración, antes de continuar con su recorrido junto al cauce del río Bravo –llamado río Grande en el lado estadounidense–, como parte del operativo encabezado por el comisionado nacional, Francisco Garduño Yáñez; el director general de Control y Verificación Migratoria, Antonio Andrés Vidal Islas; del comisario Seguismundo Doguin Garay y de Martínez Castuera.
Hasta el medio día de ayer permanecían distintos grupos en los límites de Estados Unidos, pero sin poder todavía cruzar la malla metálica vigilada por la Guardia Nacional de Texas en El Paso.
Entre los marcadores 35 y 36 se encontraban más de cien personas, entre adultos, niños, niñas y adolescentes, algunas de las cuales caminaban junto a los alambres de púas en busca de un lugar por donde subir al bordo para poder llegar con los agentes de la Patrulla Fronteriza del Sector El Paso.
Como parte de las líneas de acción del operativo se encuentra la planeación estratégica coordinada con los tres niveles de gobierno; acciones de verificación migratoria y rescate humanitario; y el “determinar y proporcionar condiciones básicas y suficientes de habilidad y operatividad del personal, para permanecer 24×7 en el campo de operación”, se lee en el informe oficial.
A través del mismo documento se pide apoyo especial con vehículos a las oficinas de representación de Tamaulipas, Nuevo león, Coahuila, Zacatecas, San Luis Potosí y Durango.
También indica que el personal comisionado a alguna oficina de representación en donde se llevarán a cabo los operativos no podrá permanecer más de 45 días.